Opositor Ariel Montoya propone “sentarse con el diablo” para salir de la crisis en Nicaragua

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Ariel Montoya, periodista y activista político nicaragüense.

San José, Costa Rica-LNP. El presidente y fundador del Partido Accionario OPA y del Foro Anticomunista de Miami, Ariel Montoya, declaró en Estados Unidos, donde realiza sus actividades políticas organizativas desde el exilio, que para salir de la crisis política que vive Nicaragua, se deberá “sentarse con el diablo”, en clara referencia a un diálogo con el dictador nicaragüense Daniel Ortega.

Montoya, conocido por sus artículos de opinión en diferentes diarios de Latinoamérica y en los círculos literarios e intelectuales de Costa Rica y Centroamérica, señaló que cada proceso social y político es diferente, por lo cual ahora las condiciones para un acercamiento entre sectores adversos, tiene sentido.

“La historia cíclica se repite, pero no debemos cometer los errores del pasado”, dijo en conversación vía telefónica con LA NUEVA PRENSA.

Advirtió que Nicaragua vive atornillada bajo dos escenarios: el gobierno de Daniel Ortega, despótico y represivo, sin interlocutores políticos opositores, y “una creciente sociedad civil en el exilio que vive acusándose en redes sociales entre todos y contra todos, disputándose ser los líderes de la diáspora que inició en 2018”.

El también escritor dijo que la imposición de estos dos escenarios mantiene trabada la ruta de una agenda para llegar a una salida en la cual los nicaragüenses aspiren a una democracia y a una vida tranquila, “como ha sido el sueño deseado en tantos años de zozobra y barbarie”.

EL LEGADO DE KONRAD ADENAUER

Para Montoya, la única salida a este atolladero está en llevar a cabo acuerdos transparentes y bien intencionados, encaminados a alcanzar el bien común, como lo expresara el canciller alemán Konrad Adenauer décadas atrás: “Si las negociaciones están orientadas a lograr el bienestar del país, ¡entonces me sentaré a la mesa con el Diablo!”, citó a Adenauer el líder opositor.

Aseveró que mientras no exista un liderazgo político al frente de esta lucha, la salida a la crisis actual tenderá a prolongarse, y señaló que las bases liberales opositoras al sandinismo han sido abandonadas por las cúpulas políticas.

También culpó del estancamiento de la situación sociopolítica que vive el país a los “sandinistas arrepentidos y oportunistas, quienes se han coludido con la derecha también oportunista”, señalando entre ellos a la agrupación Unamos.

«Si para el bien de Nicaragua hay que dar la cara a un diálogo con Ortega, estoy para enfrentar ese desafío y convocar a nuestro pueblo y al mundo a que sea parte de la libertad de Nicaragua», escribió en su cuenta de Twitter el fundador de APA y del Foro Anticomunista de Miami.

Enfatizó que si ya la opción armada queda descartada, si no existe una oposición política, salvo un par de excepciones, habrá que tomar el legado de Adenauer, protagonista cuando la Alemania Oriental se separó políticamente de la Alemania Occidental, durante la Guerra Fría tras los Acuerdos del Sarre.

“Y aunque dicho planteamiento sea chocante para los sectores cívicos mencionados, no quedará de otra”, dijo el dirigente de OPA.